se acercaba finalmente al planeta azul.
En su descenso frenético, atravesó hecha
un ovillo las primeras nubes de algodón.
*
Entonces vio, lo que parecían ser unas ramas,
que asomaban entre las nubes más bajas.
Y cayó saltando de una en una, sin lastimarse
apenas sus maltrechas alas.
*
Las ramas de aquel árbol gigante, que habían
estado heladas durante la noche, se deshelaban
ahora con los primeros rayos de sol; y la mariposa
resbaló así, suavemente entre ellas,
pasando desapercibida como un
*
Entonces vio, lo que parecían ser unas ramas,
que asomaban entre las nubes más bajas.
Y cayó saltando de una en una, sin lastimarse
apenas sus maltrechas alas.
*
Las ramas de aquel árbol gigante, que habían
estado heladas durante la noche, se deshelaban
ahora con los primeros rayos de sol; y la mariposa
resbaló así, suavemente entre ellas,
pasando desapercibida como un
destello más de rocío.
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