Pero un día, mientras precipitaba eternamente, la mariposa despertó.
y vio que no había ningún niño que la observara.
*
(Ahora los niños soñaban con terribles demonios).
Giraba y giraba sobre sí misma, gravitaba
hacia alguna parte, sus pobres alas apenas
si tenían ya polvo de estrellas y estaban
raídas por el paso inexorable de los siglos,
que las había vuelto grises y apagadas.
Ya no tenía fuerzas para enfrentarse
a la caída.
*
En un último esfuerzo, la mariposa aguzó
la vista y pudo ver hacia dónde
se dirigía...¡era el planeta azul!
*
(Había sido arrastrada por corrientes
estelares, y ahora se encontraba
en el punto de partida)
1 comentario:
Si la mariposa supiese del trafico de sus vuelos...
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